Quisiera agradecer a la docente Reina Bejarano, por este artículo sobre mi obra.
LA SOLEDAD Y LA ESPERANZA
Reina Bejarano
Se dice que Jairo Buitrago
es un escritor de libros álbum para niños; sin embargo encuentro que su obra es también para
jóvenes y adultos; que de ella se extractan variadas lecturas, diversas
abstracciones como interpretaciones, son otros componentes que un lector encuentra en su obra.
Se observa la representación
de la comunidad latinoamericana en sus dinámicas barriales del contexto urbano popular, sus carencias,
esperanzas, sus coloridos. Muestra además otras estructuras de ciudad, una atmósfera sombría, surcada por la
desigualdad, análoga en su color, donde la gente se mueve entre el centro y la
periferia; prototipo una ciudad en movimiento, anexa y en construcción de
convivencia
Sus protagonistas
principales niñas y niños invadidos de vacíos afectivos, aun así con tanta fortaleza que asumen roles de adultos, sembrando la ética del
cuidado, con sentido de protección, responsabilidad,
análisis y en la búsqueda de conjugar
comportamientos y cualidades femeninas
y masculinas
Tanto niños como adultos
reflejan soledades, expresan la necesidad tener con quien hablar, de ser
escuchados, de intercambiar y fortalecerse, no solo entre pares sino en la búsqueda
del referente adulto/a; son niñas y niños con iniciativas, aun son, en cierto sentido
libres, no contaminados por los monstruos de la ciudad.
De igual manera, Jairo hace
un paneo de la diversidad del mundo, en
esa medida desde la escuela, muestra el enorme cúmulo de diferencias
entre unos y otras, con sus formas
de bellezas, potencialidades, sueños, expresiones y la posibilidad de construir
relación entre todos y todas; nos evoca la persistencia, las relaciones
incluyentes, la comunicación abierta y como la gente se las arregla para vivir
en pueblos diversos, étnicos de un país que se mueve en los centros de acuerdo
a las dinámicas de vida de la sociedad
mayoritaria.
Así mismo las minorías son
casi invisibles, pero con sueños con la certeza de la lucha por no dejarse ganar por el paso del
tiempo.
La esperanza, es muy diciente,
es un eje perpendicular de la obra de Jairo Buitrago, aparece como una dualidad
que se mueve en los otros colores que
acompañan las ciudades grises y sus transeúntes cíclicos inmersos en el
devenir del cual los niños y niñas no quieren dejarse atrapar.
Reina
Bejarano.